Sesión de pareja en Rascafría – Andrea y Daniel
“Hoy dejo que mis manos te conozcan, que mi alma se escape de noche para ir por ti. Hoy dejo que mi mente se detenga, direccione mi corazón para correr a ti” – Natalia Lafourcade
“Tus ojos son dos magos pensativos, dos esfinges que viven en la sombra, dos enigmas muy bellos. Pero hay algo más bello aún: tu boca” – Amado Nervo
“Me enredaste en tu mirada, me abrazaste con todos mis defectos, tú si sabes quererme, tú si sabes adorarme, mi amor. No te vayas”- Natalia Lafourcade
“Quiero una mañana para inventar una melodía y enamorar. Tus ojos son estrellas de colores para mis ojos” – Natalia Lafourcade
Sesión de pareja en Rascafría
Hace un tiempo me pasó algo curioso y muy bonito y es que a través de mi cuenta de Instagram y es que se puso en contacto conmigo el padre de Andrea, un hombre estupendo que a su vez me puso en contacto con Daniel.
Daniel, un chico joven y sobre todo enamorad de Andrea me comentó la idea que tenía: pedirle la mano a Andrea en el Bosque del Finlandés en Rascafría. Daniel había visto otros reportajes que he hecho allí y pensó que era un lugar idílico. Y así es.
Sesión de pareja en Rascafría
Quedamos allí y dimos un agradable paseo por sus caminos, la verdad es que este bosque tiene algo que te inunda cada vez que lo recorres. Sea hacia el lado del lago o bien hacia la zona de las presillas. Al igual que no es lo mismo recorrerlo en invierno, que en verano o que en otoño cuando Andrea y Daniel decidieron hacerse la sesión.
Daniel tenía pensado pedirle la mano, me comentó su idea que sería a lo largo del paseo. Cuando llegamos embarcadero, Daniel me hizo una seña como contraseña de que sería ahí el momento de la pedida.
Sesión de pareja en Rascafría
Después de que Daniel «hincase rodilla» continuamos con la sesión dando un paseo por el bosque. La emoción del momento, ¡os podéis imaginar! La sonrisa de Andrea era de película! Daniel le había pedido la mano!?!?! Daniel por su lado, igual, estaba muy feliz, le había dicho que sí y ahora ya nada les podía parar. Lo siguiente: preparar la boda.
Este tipo de reportaje me encanta, como fotógrafo de boda en Madrid formar parte de este tipo de momentos es algo increíble y cada vez me gusta más. Os animo a que cometáis «locuras» de este tipo.
Sesión de pareja en Rascafría
